Autoestima y rendimiento académico en los adolescentes
Según Silva-Escorcia y Mejía-Pérez (2015), la baja autoestima está directamente relacionada con notas insuficientes, el absentismo escolar, la hostilidad, tanto hacia docentes como padres, y la desmotivación hacia los estudios.
Pero ¿Qué es la autoestima y por qué influye tanto en todos los ámbitos de la vida del adolescente, en concreto el académico?
Se podría definir la autoestima como la percepción que tenemos de nosotros mismos y el valor que nos otorgamos en base a ello. Una persona con baja autoestima no se considera merecedora de aquello que desea, por lo que no arriesga y es más propensa al abandono, reafirmando su propia percepción de valía. Alguien con una mejor autoevaluación, sin embargo, persistirá en sus intentos, aunque existan fracasos, llegando a conseguir finalmente logros y, por lo tanto, confiando cada vez más en sus capacidades. Si confiamos en nuestra valía y en nuestras capacidades, podremos afrontar los desafíos de mejor forma y aprovechar las oportunidades que nos encontramos por el camino (Branden, 1993).
La adolescencia es una etapa en la que, aquel que la transita, se enfrenta a muchos cambios y desafíos, tanto a nivel corporal, social, emocional como académico. ¿Cómo se enfrente el adolescente a estos retos? El apoyo que reciba es clave y determinante para la perpetuación de una auto-percepción positiva o negativa (Silva-Escorcia y Mejía-Pérez, 2015).
La intervención tanto de padres, como docentes, psicólogos o pedagogos en este ámbito, acompañando a los adolescentes en la identificación y cultivación de su potencial, será entonces fundamental para la reducción del abandono escolar, la mejora del rendimiento académico y, en definitiva, el buen tránsito a la etapa adulta.
Irene García Sinausía (Pedagoga)
Branden, N. (1993). El poder de la autoestima. Paidós.
Silva-Escorcia, I. y Mejía Pérez, O. (2015). Autoestima, adolescencia y pedagogía. Revista Electrónica Educare, 19(1), 241-256. http://dx.doi.org/10.15359/ree.19-1.13
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